por Lilian Uk y Reno Nasvil

domingo, 19 de octubre de 2014





EL AVIADOR
(2004)

Martin Scorsese



¿Cómo se puede hacer un film tan torpe con tantas posibilidades? ¿Cómo puede destruirse el mito de Howard Hughes de una manera tan confundida? ¿Cómo se puede hacer una película tan pobre con tanto dinero? Scorsese demuestra en cada uno de sus trabajos, que su reconocida fama no es más que un soberano error dentro del mundo de las casualidades. Todo en el film es una tragedia sin límites y como las películas de Hughes, acaba siendo un vano negocio demasiado caro, un producto de usar y tirar hecho por alguien que ha olvidado por qué hacer hoy una película.
Papel higiénico, ventilador y una revista dominical.
Devastadora, altamente acidulante, con consecuencias inevitablemente laxantes.





No hay comentarios:

Publicar un comentario